Qué hacer si se te cae el móvil al agua

¿Alguna vez te has preguntado cómo secar el teléfono en el caso en el que se te caiga al agua? ¡Que no cunda el pánico! Nosotros sabemos cómo proceder y te vamos a contar qué hacer si se te cae el móvil al agua.

¿Por qué el agua afecta tan negativamente a un smartphone?

El agua destilada no conduce la electricidad. Sin embargo, en cuanto se le añaden otros componentes como las sales minerales o los electrolitos, la cosa cambia. Por esa razón, el agua del grifo de casa, de una piscina, del mar o de un río es altamente conductora de la electricidad. Todos los dispositivos electrónicos ejecutan sus tareas dentro de un rango determinado de corriente. Si se mojan, la electricidad que transcurre por ellos se ve modificada. El chip, el condensador o la resistencia del dispositivo verá cómo su rango de operación se ve superado al haber sido invadido por un conductor. Lo más probable es que, como consecuencia, se rompa al derretirse, explotar, saltar una chispa o fundirse.

¿Móvil mojado? Que hacer si un móvil se ha caído al agua

De la explicación anterior, habrás deducido que la relación entre el móvil y el agua es muy problemática. Si a ti se te ha caído en un líquido, probablemente te preocupe que quede completamente inutilizado. Especialmente teniendo en cuenta que tendrías que comprar otro. Teniendo en cuenta cuánto contamina fabricar un móvil, no se trata de una opción muy sostenible. Por ese motivo, como en Cash Converters creemos en un consumo responsable, vamos a darte algunos consejos para que intentes evitar que el agua rompa tu teléfono. Tan solo has de seguir estos pasos.

1. Saca inmediatamente el móvil del agua y apágalo

En el momento en el que te veas en esta situación, trata de no quedar paralizado y de actuar con rapidez. Debes sacar el dispositivo del líquido y apagarlo inmediatamente. De esta forma, evitarás que la corriente se vea afectada por el agua y que los componentes del interior del dispositivo se rompan. Si lo apagas, cortarás toda electricidad. Comienza también por darle un secado superficial. Haz uso de una toalla que no deje restos y procura que todas las partes visibles del smartphone queden totalmente libres de humedad y de gotas de agua.

2. Trata de extraer todos los componentes desmontables

Aunque hayas secado la superficie, sigue siendo un smartphone mojado en su interior. Por eso, retira todas las tapas, tapones y componentes que sea posible quitar sin necesidad de herramientas ni de desmontar el móvil. Si puedes, quita la batería, la tarjeta SIM y la de memoria, las tapas y demás accesorios de fácil retirada. Trata de secarlos por separado, asegurándote de que no quede ni rastro de humedad en ninguna de las partes. Es importante secarlo rápidamente para evitar la posible oxidación de cualquiera de estos componentes indispensables del dispositivo.

3. Absorbe la humedad del smartphone mojado

Una vez hayas atendido a las partes separables, es hora de que te centres en el móvil en sí. Debes absorber toda su humedad cuanto antes. Nosotros, del mismo modo que te hemos enseñado cómo soldar con estaño, te daremos ahora algunos trucos para retirar la humedad de un móvil.

• Primero, con mucho cuidado, haciendo uso de esponjas de diversos tamaños, retira toda el agua que puedas. Trata de evitar a toda costa soluciones que tengan que ver con el calor. Nada de secador, horno o microondas. Esto solo fundiría los componentes internos del smartphone, dejándolo inútil.
• Después, toma copos de avena o perlas de gel de sílice y sumerge en ellos tu móvil. No uses arroz, ya quedó demostrado que no es tan eficaz como se cree.

4. Deja que el secado sea completo, ¡paciencia!

Es fundamental que no enciendas tu móvil antes de que esté completamente seco. Mientras esté apagado, aunque siga mojado, todavía hay esperanzas de poder salvarlo. Si lo enciendes demasiado pronto, sin embargo, lo único que lograrás será un fatídico cortocircuito que acabará con tu dispositivo. En esta línea, nosotros te recomendamos que dejes transcurrir al menos una noche entera con tu móvil apagado. Esto, en la mayor parte de los casos, será suficiente.

5. Vuelve a disfrutar de tu smartphone

Si has seguido estos pasos al pie de la letra, lo más probable es que puedas recuperar tu móvil perfectamente. Te habrás ahorrado el importe de uno nuevo, así como la necesidad de consumir y de aumentar tu huella de carbono. Al fin y al cabo, no hay mejor manera de actuar de forma sostenible que evitar el consumo desmesurado de productos de nueva fabricación, que tanto CO₂ producen.

Y si el móvil que cae al agua ha dejado de funcionar al 100%

En Cash Converters nos encantan las segundas oportunidades, de eso no cabe duda. Apostamos por alargar la vida de los productos y, por eso, cada día ponemos a rodar la economía circular con miles de productos. Pero, también sabemos que hay veces que esto no es posible, ya los productos dicen adiós y llega el momento de despedirse de ellos como merecen.

Cómo reciclar un teléfono que ya no funciona

¿Y si no hay manera de salvarlo? ¡Recíclalo!

Lo más importante es que no tires el teléfono a la basura. Cada teléfono contiene elementos muy contaminantes para el medioambiente. Y no solo eso, la extracción de todos ellos también tiene un impacto negativo en nuestro Planeta que podemos evitar reutilizando algunas de las piezas de los teléfonos móviles que dejan de funcionar.

En Cash Converters contamos con algunos puntos verdes en nuestras tiendas que puedes usar para que reciclemos los componentes junto a Ecolec. De este modo, estarás fomentando un consumo más responsable y colaborando a crear un mundo mejor, poniendo en marcha la economía circular.

Por qué apostar por un teléfono móvil de segunda mano

Nos sobran los motivos para dar una segunda vida a los productos que aún tienen muchas historias que contar y aquí te vamos a contar algunos:

• Ahorro: Cuando compras un teléfono de segunda mano están ahorrando mucho dinero respecto a un teléfono de nueva fabricación.
• Garantía: Sí, todos los productos de Cash Converters cuentan con 2 años de garantía.
• Consumo muuucho más sostenible: Cada vez que das una segunda oportunidad a un producto estás fomentando la economía circular y evitando el impacto negativo y contaminante de la fabricación.