Tipos de routers: qué necesitas saber para elegir uno

Todo el mundo sabe qué un router es un aparato que nos da acceso a una conexión Wi-Fi, pero lo que menos gente sabe es que existen diferentes tipos de router y, dependiendo de lo que queremos, nos merecerá más la pena comprar un tipo de router u otro.

Los routers se han convertido en una de las herramientas computacionales más importantes de esta era. Sin routers, no podríamos usar Internet para comunicarnos, recopilar información, colaborar y aprender.

En este artículo, vamos a explicar qué es un router, cómo identificar un buen router de uno malo y los diferentes modelos que hay, analizando en cada puesto sus características principales. 

¿Qué es un router?

Un router es un dispositivo que se encarga de gestionar la red de datos de nuestra casa y permite que uno o varios dispositivos se conecten a la red de manera simultánea. Solicita y recibe datos de los distintos sitios de la red según nuestras necesidades.

Para que los datos que enviamos lleguen correctamente a su destino, un router utiliza una tabla de enrutamiento y busca la ruta más eficiente hacia ese destino, de ahí viene su nombre.

No hay que confundir el router con el módem, aunque ambos tengan papeles esenciales. Mientras que un router forma redes y gestiona el flujo de datos dentro de esas redes, el módem se encarga de conectar esas redes a Internet.

Para que se puedan mantener las redes en funcionamiento, los routers conectan ordenadores y otros dispositivos (como una impresora) entre sí, creando un canal de comunicación por el que puedan “hablar”.

¿Merece la pena alquilar o comprar un router?

Aunque puede ser una pregunta que dependa del lugar donde vives, es bueno que sepas que tienes ambas opciones. La mayoría de los proveedores de servicios de internet, por sus siglas ISP, te ofrecen la posibilidad de alquilar un router combinado con un módem por una cuota mensual. Esta opción es la que la mayoría de las personas tienen. 

Veamos cuales son los pros y los contras de alquilar y comprar tu propio router/módem.

Alquilar un router mediante un ISP:

• El soporte técnico suele estar incluido.
• La instalación del router viene incluida.
• Sustitución gratuita del dispositivo si se queda obsoleto (dependiendo de la compañía, te puedes poner más o menos pegas).
• A la larga, es más caro y al final, no tienes nada.

Comprar un router por tu cuenta:

• Estás seguro del módem que compraste. Está actualizado y cumple con tus necesidades.
• A largo plazo, es más barato.
• Actualiza los dispositivos más recientes cuando quieras.
• No dependes de un ISP y puedes cambiar a otro cuándo desees.
• La instalación y los problemas te los comes tú, ten cuidado.

Cómo reconocer un buen router

Da igual si al final vas a comprar o alquilar un router, es bueno saber cómo reconocer uno bueno de otro malo. Habrá situaciones en las que tendremos que comprar un router, ya sea para mejorar las condiciones técnicas que nos incluyen los proveedores de servicios de Internet o para comprar uno nuevo. En esas situaciones, deberemos fijarnos en ciertas características técnicas para no comprar gato por liebre:

• Alcance y cobertura.
• Firewall y soporte VPN.
• Que pertenezca a una buena marca o a una con buenas críticas por parte de los usuarios.
• Compatibilidad con la banda ancha 3G, 4G y 5G.
• Dificultad de instalación.
• Prestaciones respecto a la seguridad.
• Velocidad de transferencia.

Estas son algunas de las características más importantes que debes echarle un ojo antes de realizar cualquier tipo de compra. Siempre es recomendable preguntarle a un profesional antes.

Tipos de router

Como hemos mencionado antes, existen diferentes tipos de routers, y dependiendo de tus necesidades, puede que te convenga más un tipo de router antes que otro tipo. Para ello, aquí te traemos una lista con los routers más utilizados y extendidos.

Si estás interesado en comprarte un router pero antes quieres probarlo, o simplemente no quieres gastar mucho dinero, te dejamos por aquí una lista de routers de segunda mano totalmente funcionales y diferentes entre sí. Recuerda que no necesariamente necesitas un router de última generación para poder disfrutar de una buena conexión a Internet y disfrutar de todas sus funciones. La mayoría de las veces, simplemente necesitamos  otro tipo de routers. Así que, no tengas miedo a comprar cosas de segunda mano, y recuerda, con esta acción estás ayudando a disminuir la contaminación tecnológica.

Router inalámbrico

También conocidos por router Wi-Fi, son los más comunes actualmente. Visualmente, son fáciles de reconocer ya que, por lo general, disponen de 3 antenas. Estas antenas transforman los paquetes de datos en señales de radio. De esta forma, es posible establecer una conexión sin la necesidad de utilizar cables entre equipos y dispositivos de una determinada red.

Actualmente, es bastante raro que un router de este tipo venga sin módem. Por lo general, este router tiene integrado su propio módem.

Si te interesa este tipo de router, deberás ver ciertas características importantes antes de comprar uno. Aspectos como la velocidad o la fuerza de la señal influirán mucho cuando estés utilizando esta conexión.

Router cableado o tradicional

Aquí incluímos a todos los routers que crean conexiones mediante un cableado. Utilizan redes telefónicas para conectar equipos a la red del proveedor de servicios. Su función principal es convertir las señales analógicas en digitales y viceversa.

Su principal característica es que solo se pueden conectar los dispositivos al router a través de cables Ethernet o conectores USB. No tienen la función inalámbrica, por lo que cualquier dispositivo que no tenga adaptador de cable, no podrá ser conectado a este tipo de routers.

Router USB

No hay que confundirlo con el router cableado pues ambos routers funcionan de manera diferente.

El router por USB usan un dispositivo que se conecta mediante una conexión ad-hoc. Para explicarlo de manera más coloquial, se utiliza un dispositivo que ya se encuentra conectado a Internet y permite compartir esa conexión de manera inalámbrica con otros equipos que se encuentran a su alcance. Funciona de manera parecida al router Wi-Fi.

La principal desventaja de este tipo de router es que el dispositivo que está conectado a Internet deberá permanecer encendido para que otros dispositivos se puedan conectar. En cuanto se apague, la red dejará de funcionar.

Router virtual

Hoy en día, existen redes locales en la nube a las cuales te puedes conectar a Internet, conservando las ventajas en cuanto a seguridad de las redes internas tradicionales.

Otra de sus ventajas es que su instalación y configuración es muy sencilla, permitiendo tener acceso a todas las funciones desde una aplicación con una interfaz gráfica intuitiva y grácil. Cosas cómo el número de dispositivos que se pueden conectar simultáneamente se pueden modificar.

Gracias a todo esto, podremos acceder a todas las funciones de manera más efectiva y cómoda sin tener que habilitarlas de forma manual.

¡Y hasta aquí nuestra guía! Te hemos enseñado los diferentes tipos de routers y cómo elegir el mejor. Si todavía te preguntas qué tipo de router es el adecuado para tu casa, deja tu duda en nuestra caja de comentarios y nuestros expertos te ayudarán a encontrar el mejor router para ti y tu familia.