Cómo elegir un piano

La música es una de las actividades que mejor cultivan el alma, la creatividad y la disciplina. Sin duda, una experiencia que todos deberían probar alguna vez en la vida. Si te has propuesto comenzar, te ayudaremos con este camino enriquecedor y emocionante. Para ello, a continuación te explicaremos cómo elegir un piano. 

Tipos de piano 

¿Has pensado en tener un piano en casa? Pero ¿con cuál quieres comenzar? Es posible que no te hayas planteado antes estas cuestiones, pero debes saber que son primordiales. En la actualidad, existen numerosos tipos de piano, desde los que tienen un toque más clásico, hasta los que se caracterizan por su funcionamiento contemporáneo. 

Piano acústico 

Este es el sistema más clásico que existe, basado en lo que se denomina cuerda percutida. Es decir, hay un mecanismo que integra exclusivamente propiedades físicas. Cuando pulsas una tecla, esta cuenta con un martillo que produce una vibración al golpear sobre los puentes de una tabla armónica.

¿Cuándo es recomendable esta opción? Principalmente, cuando estás empezando en la música pero quieres disfrutar de un avance sólido y constante. Es decir, no es la mejor alternativa para quienes desean dedicarse profesionalmente o solo lo quieren como afición. En este último caso, mejor opta por un teclado. 

Piano de cola 

Los pianos de cola representan, sin duda alguna, una alegoría a la música que ha marcado los siglos anteriores. Son uno de los instrumentos más bellos, tanto visual como acústicamente, y cuentan con un potencial inimaginable. Funcionan mediante el mismo mecanismo (cuerda percutida), pero disponen de una proyección de sonido mucho mayor.

Este tipo puede clasificarse, asimismo, en distintos subtipos según las medidas: 

• Gran cola: longitud superior a los 256 cm. 
• Tres cuartos de cola: entre 226 y 256 cm. 
• Media cola: entre 190 y 225 cm. 
• Un cuarto de cola: entre 131 y 190 cm. 
• Cola mignon: 130 cm de longitud. 

Por lo general, su longitud estará vinculada directamente al número de teclas que posea. Esto, de todos modos, lo veremos después. 

Piano digital 

El piano digital es un instrumento que, en los últimos años, ha ganado gran popularidad. Es una alternativa más económica a los tradicionales, además de una buena opción para quienes buscan comenzar en la música. Funciona mediante la integración de sonidos pregrabados que imitan a los que emiten los pianos acústicos. 

Su mecanismo es relativamente complejo, pero no requiere de elementos analógicos. Funciona mediante una especie de impulso eléctrico. La principal ventaja es que permite emplear auriculares, por lo que no tienes que preocuparte por las molestias que el sonido pueda ocasionar. 

¿Qué debo tener en cuenta a la hora de comprar un piano? 

Cuando vayas a escoger un piano, hay ciertos aspectos que debes conocer. Más allá de lo que hemos visto antes, tu elección debería estar condicionada por tres factores principales: 

• El tipo de sonido que deseas. 
• Las condiciones de tu vivienda. 
• El uso que planeas darle. 

Pero ¿cómo fusionar todo lo anterior para comprar el más adecuado? Te lo explicaremos de una manera todavía más detallada para que no te quede ninguna duda. 

Número de teclas y octavas 

Según su longitud y formato, hay pianos con distintos números de teclas, que definen las octavas. Estas últimas se corresponden con las escalas (de Do a Do) que pueden interpretarse: 

• 4 octavas: 49 teclas. 
• 5 octavas: 61 teclas. 
• 6 octavas: 74 teclas. 
• 7 octavas. 88 teclas. 

Sensibilidad y contrapesado 

La sensibilidad es la fuerza necesaria para provocar un sonido en el piano al presionar la tecla. Si quieres darle un uso profesional, te recomendamos un piano en el que esta predomine. De este modo, podrás interpretar desde pianissimo hasta forte con mayor distinción acústica. Esto, obviamente, lo percibe el público y lo valora de manera muy positiva. 

Respecto a los pianos digitales, nuestro consejo es que elijas uno con contrapesado. Este sistema reproduce los sonidos con mayor fidelidad, dado que calcula la fuerza que se está ejerciendo sobre la tecla. Después, matiza el impulso eléctrico para subir o bajar la intensidad de la nota. 

Estudio o creación 

¿Para qué quieres el piano? Si pretendes darle un uso estrictamente dedicado al estudio, lo mejor es que optes por uno acústico o de cola. De esta forma, podrás centrarte mejor en la calidad del sonido y efectuar una interpretación más fiel. ¿Qué significa esto? Que podrás enfocarte en el sonido de cada nota y perfeccionar tu técnica progresivamente. 

En cambio, si prefieres una finalidad más creativa, la mejor opción son los digitales. Estos cuentan con una biblioteca de sonidos que suele oscilar entre los 15 y los 30. Entre ellos están los del órgano, el clavicordio o distintos formatos de piano. Incluso puedes grabar una composición y usarla como base para la siguiente. Eso sí, todo depende del modelo. 

Por qué comprar un instrumento de segunda mano 

Después de haber visto cómo puedes hacerte con el piano idóneo, te plantearemos una posibilidad. ¿Y si lo consigues de segunda mano? Estos instrumentos suelen tener un precio bastante elevado, algo que puedes solventar con esta opción. Más allá de este aspecto, hay otras ventajas que debes conocer: 

• Han sido sometidos a un estricto control de calidad para comprobar su funcionamiento. 
• Son la mejor alternativa si es la primera vez que compras un instrumento y quieres probar. 
• Puedes tenerlo de manera rápida en casa y, generalmente, viene ya montado y listo para tocar. 
• Es una buena forma de hacerte con un modelo de marcas prestigiosas por un precio menor. 
• Como inviertes menos dinero, puedes comprar otros instrumentos que siempre hayas deseado. 
• Disponen de 2 años de garantía.

Después de ver todas estas ventajas, queda patente que esta posibilidad es muy ambiciosa. Nuestro consejo es que comiences por un instrumento de segunda mano. Cuentan con un gran potencial y, lo mejor de todo, te permiten apostar por la música sin hacer un desembolso económico desmesurado. 

Como has podido ver, elegir un piano no es tan complejo como puede parecer. Lo que tienes que hacer es determinar bien tus necesidades y tu plan de estudio, y luego hacerte con el que más se adapte a ellos. Después, recuerda que la constancia y la dedicación son las claves para avanzar en un ámbito tan amplio como el de la música.