Cómo elegir el mejor equipo de grabación

Al comprar un equipo de grabación estás realizando una gran inversión. Es el primer paso para crear un pequeño estudio en casa o uno mayor. Antes de adquirirlo, tienes que prestar atención a una serie de factores. De este modo, encontrarás el que más se ajusta a tus necesidades y circunstancias. 

¿Grabación de audio o producción audiovisual? 

Esta es la primera duda que tienes que resolver. El equipo variará en función del uso que le des, ya que no es igual grabar audio que imágenes. Si bien necesitarás micrófonos en ambos casos, no ocurre lo mismo con las cámaras de vídeo o para fotografías. Esto también afecta a la iluminación o hasta los programas informáticos disponibles. 

Así que, no te queda más remedio que pararte a pensar en el uso que le darás al equipo. Esto impacta de lleno en el coste total. En caso de que sea para producción audiovisual, necesitarás varios objetivos para las cámaras. Cada uno te permitirá captar imágenes con diferentes definiciones o colores. Si es para grabar música, los micrófonos son un elemento esencial, ya que son indispensables para recoger la voz. 

Pero no basta con resolver esta primera duda. Hay otros factores en los que pensar antes de comprar, como harías con el equipo de música para casa. Al final, se trata de sacarle el mayor partido al dinero que tienes disponible, el cual es esencial para cumplir tus objetivos. Si actúas de la manera adecuada, podrás confeccionar el mejor equipo a un coste razonable. 

Elementos que no pueden faltar en tu estudio de grabación 

Para que te hagas una idea de por dónde empezar, supongamos que vas a comprar un equipo para grabar audio. Este estará compuesto por una serie de elementos esenciales que te permitirán dar los primeros pasos. El objetivo es construir un pequeño estudio en tu propio dormitorio, el cual será fácil de usar y no tendrá un coste demasiado alto. Fíjate en estos dispositivos. 

Micrófonos 

Son el elemento fundamental del equipo, el primero que viene a la mente cuando quieres montar tu estudio. Los micrófonos adecuados son los condensadores. Están diseñados para captar tanto la voz humana como una amplia variedad de instrumentos. Recogen el sonido que hace vibrar una lámina libre que poseen, la cual se acerca a otra fija. La capacitancia varía y provoca que la señal acústica se transforme en una eléctrica. 

Utilizarlos es una cuestión de calidad de sonido, ya que reducen en gran medida el ruido ambiental. Además, hay una amplia variedad de micrófonos condensadores entre las que elegir. No te costará encontrar el más adecuado para lo que quieras hacer, desde grabar canciones a un podcast. 

Altavoces 

Es otro elemento importante que te permitirá controlar la grabación escuchando el resultado. Un factor que debes tener en cuenta es el tamaño y cuántos vas a utilizar. Esto dependerá del espacio disponible para montar el estudio. Sin embargo, los más frecuentes van desde las 5″ a las 8″. Eso sí, procura disponerlos de manera adecuada para escuchar el sonido con la máxima claridad. 

Auriculares de estudio 

Cuando quieres escuchar tu creación con todo detalle, los auriculares de estudios son la mejor opción. Existen dos tipos entre los que elegir: abiertos y cerrados. Los primeros dejan pasar el sonido ambiente, mientras que los segundos lo evitan. Estos últimos son los adecuados para tu equipo, ya que aíslan de cualquier ruido que pudiera resultar molesto. 

Así, escucharás las diferentes partes de tus canciones sin interferencias. En caso de que exista algún fallo, no te costará encontrarlo y ponerle fin. 

Controladores MIDI 

Es una herramienta destinada a mejorar la expresividad de tus canciones. El formato de los controladores MIDI varía. Puede ser un teclado, cajas de ritmos, pads… cada uno se adapta a los instrumentos que vas a utilizar y al tipo de música que tocas. Además, te permite reproducir diferentes recursos de manera digital. Es decir, si no dispones de un piano, el controlador actuará como si fuera uno. Lo mismo ocurriría con una batería, por poner otro ejemplo. 

Se han convertido en un elemento imprescindible en los equipos para grabaciones musicales. Esto se debe a que facilitan el acceso al mundo de la composición. Reducen la cantidad de instrumentos y otros recursos que necesitas para empezar. De este modo, son una gran inversión que te permite reducir los costes y ponerte manos a la obra en el menor tiempo posible. 

La interfaz de audio 

Con la interfaz de audio conectas cada elemento a un ordenador. La ideal es aquella que une calidad de conexión y versatilidad. Esto impedirá que se cuelen interferencias, distorsiones y cualquier sonido que pueda estropear tus piezas musicales. Es un componente que vas a usar todo el tiempo, por lo que busca uno que sea resistente y de alta calidad. 

Para complementar la interfaz, puedes recurrir a un mezclador. Su función es la de darte mayor control sobre los niveles del sonido que entran y salen. Además, es una pieza importante si tienes un grupo o estás pensado en formar uno. Podrás configurar líneas específicas para los diferentes integrantes, lo que te ayuda a garantizar la máxima calidad de audio. 

Cableado 

A la hora de conectar los diferentes aparatos, vas a necesitar un buen cableado. En un estudio convencional se llegan a utilizar cientos, pero no tendrás que usar tantos al principio. Basta con un cable XLR para unir la interfaz de sonido con el micro y otros para los altavoces que estés usando. De esta forma, tendrás unas conexiones de calidad y resistentes, aunque procura mantener el orden desde el primer día. 

En definitiva, estos son los elementos que necesitas para montar un equipo de grabación inicial. Cuando llegue el momento de dar el siguiente paso, tendrás que recurrir a otros elementos. Sin embargo, con estos tendrás una base sólida. Y a la hora de abaratar los costes, te ayudamos en Cash Converters. Disponemos de un amplio catálogo de dispositivos de segunda mano a precios muy reducidos. ¡Ven a conocernos para encontrar justo los que necesitas!